Las visitas al Castillo de Loarre no han dejado de incrementarse y, de hecho, cada vez van a más. Por sus muros románicos han pasado este 2019 casi 110.000 personas. Unas cifras que, según explica el alcalde de Loarre y guía del castillo, Roberto Orós, no son nada despreciables, teniendo en cuenta la zona en la que se ubica el monumento. «No tenemos una gran capital, ni grandes aeropuertos, ni cruceros ni nada por el estilo a nuestro alrededor, y aún así estamos en la primera división de los monumentos», apunta Orós.

El enclave del monumento, el paisaje en el que se enmarca y su buen estado de conservación después de casi mil años de construcción dan al Castillo de Loarre un valor único. La promoción de estos 15 últimos años han ayudado a mejorar los accesos y servicios al complejo, causa que también ha propiciado el aumento de visitas.

El perfil del visitante es muy variado: hasta un 30% pertenece a la comunidad de Aragón, el 35% son extranjeros -muchos de ellos estadounidenses- y el resto son de comunidades limítrofes. Los periodos de vacaciones y puentes cortos son las fechas con más demanda.

En 2020 el Castillo de Loarre cumplirá un siglo desde que Sancho III el Mayor pisará las tierras lobarrenses y construyera el germen de la fortaleza actual. Aprovechando esa fecha, el próximo año vendrá cargado de una gran programación con un reto: seguir superando cifras.